Desde tiempos muy remotos,
el lirio ha sido una de las plantas cuya
flor más ha llamado la atención del hombre.
Se representaba en los bajo relieves asirios y era ya conocida por los antiguos egipcios. El profeta Daniel, en la Biblia, inmortaliza la casta esposa de Joaquín bajo el nombre de Susana, que en hebreo significa lirio, y en los Evangelios se ve ensalzado por palabras del mismo Jesucrito: "Contemplad los lirios del campo que no labran ni hilan, y en cambio ni Salomón con toda su gloria se vistió con tanto primor".
 |
| Los liliums nos inspiran !!! |
No obstante, igual entonces que ahora,
el nombre de lirio no corresponde a una determinada especie de planta, sino a cierto número de especies lo suficientemente distintas unas de otras para justificar que los botánicos las separen en sus clasificaciones.
Así se llaman lirios a especies del género iris, cuyo rizoma seco ya utilizaban los antiguos Egipcios para obtener un delicado perfume, y también a especies del género
Lilium , que incluye el lirio blanco o azucena, símbolo del candor , pureza e inocencia.
Las diferencias entre el lirio cárdeno (Iris germánica) y la azucena (Lilium Candidum)
 |
| Nos gustan las postales de liliums!!! |
El lírio cárdeno es una planta con un rizoma (tallo subterráneo) rastrero y muy grueso. Posee además un tallo aéreo, que alcanza de 70 a 90 centímetros de altura. Las hojas tienen la forma de una espada, se envainan unas con otras por sus bases y salen en su mayor parte del rizoma.
Las flores de color azulado o cárdeno, forman un ramillete en el extremo del tallo; son grandes y compuestas de seis piezas, tres combadas hacia abajo y tres erguidas que se unen en el ápice; los estambres son de color amarillo. El fruto es una cápsula ovoidal. Es planta de origen mediterráneo, propia de lugares rocosos.
La azucena, por su parte
, nace de un bulbo semejante a una cebolla, escamoso, grande y blanco. El tallo, de un metro de altura aproximadamente, está cubierto de hojas , las de la base extendidas en torno y las otras erguidas, lanceoladas y ligeramente onduladas en los bordes. Las flores de 3 a 10, forman un ramillete terminal de un blanco deslumbrador, y están constituidas por seis piezas combadas hacia fuera.
A diferencia de los iris, con tres estambres, la azucena y sus congéneres tienen seis, también de color amarillo. Las flores emiten un perfume muy intenso, especialmente al anochecer. La azucena procede del Próximo Oriente y se encuentra representada, ya en forma cultivada, en un vaso cretense del siglo XVII antes de Jesucristo.
En estos dos "lirios" tomados como modelo, se encuentran las cualidades por las que un gran número de estas especies son tan apreciadas para adorno de los jardines. De sus cruces y selección proceden variedades espectaculares por sus colores, matices y forma, que tienen gran aplicación para formar parterres y como plantas de macetas.
